El advenimiento de las mujeres en la esfera pública ha constituido un giro mayor en la historia. Este pasaje ha trastornado las representaciones dominantes y revelado contradicciones inherentes a la organización del orden social. Las mujeres plantean un cuestionamiento profundo de los valores dominantes del sistema patriarcal, a la vez que denuncian la responsabilidad de éste en la exclusión de una gran parte de la humanidad, la dominación de los más fuertes y la destrucción del planeta.
El advenimiento de las mujeres en la esfera pública ha constituido un giro mayor en su historia. Ellas han expresado en este acto su rechazo de la división privado/público, una construcción social puramente patricarcal que atribuye, en base a una visión biologista, a las mujeres la esfera privada y a los hombres la esfera pública. Este pasaje ha trastornado las representaciones dominantes y revelado contradicciones inherentes a la organización del orden social.
Las mujeres han emprendido un doble proceso que es el de verse a ellas mismas como sujetos, y también pensar la sociedad con la mirada crítica que puede darles su condición de oprimidas. Las mujeres establecen en efecto un cuestionamiento profundo de los valores dominantes del sistema patriarcal, a la vez que denuncian la responsabilidad de éste en la exclusión de una gran parte de la humanidad, la dominación de los más fuertes y la destrucción del planeta.
Lejos de estar satisfechas con cambios que sólo benefician a algunas, proclaman una transformación radical de las relaciones de l@s individu@s entre ell@s y con su entorno.