| Puede 
              también ver los resultados del Foro de la Alianza para Construir 
              la Paz, que tuvo lugar de diciembre de 2001 a junio de 2002, de 
              plena actualidad   
              La información siguiente fue enviada por Mari Olivella, de 
              Barcelona, Director de NovaCis y coordinador del foro electrónico 
              del Equipo Internacional de Facilitacion de la Alianza y por John 
              Stewart, miembro del Consejo Internacional de las Fuerzas no violentas 
              por la Paz. Sitio web de las "Fuerzas No Violentas por la Paz". 
              Es en inglés, pero muchos de los documentos están 
              traducidos en otros idiomas.   
              También está a su disposición la nota de presentación 
              de la cuarta mesa de diálogo y controversia, que fue una 
              de las innovaciones de esta última edición del FSM.
 
 Varios 
            artículos redactados después del Foro de Porto Alegre 
            2003 ya están disponibles. Deseamos con esto ilustrar la diversidad 
            de las contribuciones de los aliados en este evento.
 
 
 
   | Discurso de Nadia Aïssaoui, 
              Algerina, actualmente en El Líbano, durante la Mesa de Diálogo 
              y Controversia en el Foro Social Mundial de Porto Alegre en enero 
              pasado entorno al tema: contra las guerras del siglo XXI, ¿cómo 
              construir la paz entre los pueblos? Condenados a la esperanza Nadia 
              Leila Aïssaoui - Argelia-Líbano - nadialeila@hotmail.com
 ¿ 
              Cómo se encara el problema ?
  Hablar de la construcción de la paz parece 
              ser hoy en día algo más cercano al lenguaje de la 
              utopía que a un emprendimiento posible.  ¿ Cómo enfrentar el estado de desenfreno mundial 
              al cual asistimos?  Mi intervención intentatrá presentar 
              algunas pistas de reflexión sobre las raíces de la 
              guerra y sobre nuestra responsabilidad con respecto a la construcción 
              de la paz.• ¿ Cómo definir la guerra ?  La guerra es el signo del fracaso de la Humanidad 
              y de su impotencia para detener la pulsión de muerte que 
              existe en cada uno de los seres humanos. La guerra no se limita solamente a los conflictos armados, sino 
              que abarca todas las formas sistemáticas de violencia que 
              se han instalado en las sociedades a partir de un sistema patriarcal 
              que siempre privilegió el recurso a la dominación 
              y a la presión para afirmarse a sí mismo.
 Guerra es toda forma de injusticia generadora de violencia. Tanto 
              si se trata de racismo como de machismo, de discriminación 
              económica como de una ocupación o un conflicto armado, 
              lo que está en juego son la dignidad humana y los Derechos 
              Humanos.
 Las elocuentes cifras del informe del Programa de las Naciones Unidas 
              para el Desarrollo en el año 2000, que describían 
              las condiciones de vida en el mundo actual, muestran que los juegos 
              de poder económicos y políticos se han vuelto más 
              visibles aún a escala internacional con la expansión 
              del neoliberalismo que declaró la guerra a millones de seres 
              humanos.
 Podemos leer allí, por ejemplo, que :
 
              
                 más de mil millones de seres humanos 
                  viven con menos de un dólar diario 
                 las fortunas de los 200 individuos más 
                  ricos del mundo superan los ingresos del 41% de la población 
                  mundial del planeta (2.800 millones de seres humanos)
                 las fortunas de los 3 individuos más 
                  ricos superan el PBI de 48 estados pobres reunidos
                 300 000 niños y millones de mujeres 
                  viven en condiciones de esclavitud y de prostitución
                 hay actualmente 26 guerras en el mundo (de 
                  las cuales 18 tienen lugar en África)
                 2,5 millones de personas han muerto y otros 
                  12 millones han sido desplazados en los diez últimos 
                  años. Con respecto a todas estas cifras, no debemos perder 
              de vista el hecho de que la militarización participa a la 
              prosperidad de toda una economía de la guerra sostenida por 
              los complejos militar-industriales cuyos beneficiarios son los países 
              occidentales poderosos (en particular los Estados Unidos) y sus 
              aliados de los regímenes del Tercer mundo.Dichos complejos militar-industriales controlan ampliamente a los 
              grandes medios de comunicación, que se ocupan de crear un 
              clima de psicosis del miedo. Los canales mediáticos están 
              repletos de series televisivas (que a menudo se ofrecen gratuitamente 
              a los países del Sur) que hacen una apología de la 
              violencia y de la virilidad. La televisión, al substituir 
              a los padres –que a su vez se ven sumergidos por el trabajo-, 
              se ha tornado el medio de socialización y de educación 
              para la violencia y el machismo.
 Al mismo tiempo, la censura, la desinformación y el control 
              de la información son moneda corriente cuando se trata de 
              justificar una asignación de presupuestos para la militarización, 
              lograr transparencia sobre los perjuicios de lo nuclear y el impacto 
              sobre el medio ambiente y la seguridad del planeta.
 ¿ Cómo entender el contexto árabe a partir 
              de las condiciones mundiales?  Volviendo sobre el tema de las raíces de 
              las guerras y de la violencia, podemos observar que en los países 
              árabes (y tal vez en buena parte de los países del 
              mundo), el ejercicio de la violencia se practica a varios niveles: 
              en las relaciones familiares, en las relaciones sociales (políticas 
              y económicas) y en la gestión de las cuestiones públicas 
              que implementan los distintos regímenes.- En lo relativo a las relaciones familiares: la estructura jerárquica 
              de la familia patriarcal da pleno poder al hombre y a sus sucesores 
              masculinos, que ejercen un poder de coerción y de control 
              sobre las mujeres con el objeto de que éstas interioricen 
              y reproduzcan los modelos de dominación con los cuales ellos 
              se benefician plenamente.
 - En lo relativo a las relaciones sociales: la organización 
              social se inspira directamente de la estructura familiar. Tanto 
              es así que las posiciones estratégicas de poder están 
              exclusivamente monopolizadas por los hombres, relegando así 
              a las mujeres a la esfera de lo privado, aun cuando éstas 
              afirman cada vez más su presencia dentro de la esfera productiva. 
              La escalada de violencia de la que son objeto no es fuente de asombro, 
              ya que es la misma que recae sobre cualquier actor social que intenta 
              cuestionar el orden dominante. Dicha violencia se manifiesta por 
              una amenaza que pesa sobre la seguridad de las mujeres en el espacio 
              público y, al mismo tiempo, por una radicalización 
              de los textos de ley de inspiración religiosa que rigen el 
              estatuto personal de la mujeres, convirtiéndolas en ciudadanas 
              de segunda clase. Los otros tipos de cuestionamientos sufren de 
              la misma manera la reducción o la ausencia total de las libertades 
              y posibilidades de expresión democrática.
 - En lo relativo a la gestión pública implementada 
              por los distintos regímenes: el mundo árabe se encuentra 
              bajo el reinado de regímenes dictatoriales, con frecuencia 
              provenientes de golpes de estado militares, que han generado un 
              sistema clientelista y opaco a la vez, con su cortejo de corrupción 
              y monopolización de las riquezas por parte de una minoría 
              y una marginalización de las mujeres. Dichos factores terminan 
              por crear una frustración que, en gran parte, se manifiesta 
              a través del aumento del islamismo político radical.
 Pero el mundo árabe también enfrenta 
              una situación compleja y única, proveniente de la 
              colonización y de la ocupación israelí de Palestina. 
              Una colonización y una ocupación apoyadas desde hace 
              décadas por los Estados Unidos y por el silencio de Europa 
              frente a sus agresiones, que paralizan a toda la región, 
              fortalecen los regímenes autoritarios dándoles pretextos 
              para la militarización y acumulan tensiones, frustaciones, 
              cólera y odio. En Palestina se presentan actualmente todas las 
              dimensiones y problemáticas esenciales de la guerra. Es en 
              ese conflicto donde está en juego la credibilidad de los 
              países progresistas para actuar en el mundo, tal como lo 
              estuvo en el caso de la lucha sudafricana contra el apartheid.  ¿Qué 
              hacer para construir una paz sostenible?
 Desde nuestra perspectiva, la cuestión que 
              se plantea no es tanto la existencia de propuestas para la paz, 
              sino la de cómo implementarlas, mientras que la relación 
              de fuerzas sigue inclinándose en favor de los intereses de 
              las lógicas de guerra. Intentaré presentar algunas propuestas partiendo de esa base, 
              y volveré una vez más sobre el tema de Palestina, 
              repitiendo que sólo una paz justa en Palestina y la liberación 
              de su pueblo contribuirán a modificar considerablemente toda 
              la situación en la región y, por consecuencia, en 
              el mundo.
 La construcción de una cultura de paz requiere 
              un trabajo que debe realizarse a varios niveles: 
              
                 El nivel individual y colectivo: salir de la lógica 
                  patriarcal implica que cada uno de nosotros se aparte del sistema 
                  jerárquico actual y cuestione seriamente la escala de 
                  valores imperantes. Por citar un ejemplo, los movimientos feministas 
                  llegaron a elaborar un pensamiento crítico cuando las 
                  mujeres lograron desmistificar las ideologías y los estereotipos 
                  invocados por la sociedad patriarcal. Acabar con la glorificación 
                  del mito de la guerra y del guerrero representa un primer paso 
                  necesario para la construcción de una cultura de paz. 
                  Luego se trata de poner en primer plano, a través de 
                  la educación y la práctica de los valores relativos 
                  a la vida, la solidaridad, la igualdad y la justicia, en lugar 
                  de la competencia, la dominación, el dinero y el beneficio. Obrar por la construcción de democracias participativas 
                  que tomen en cuenta las aspiraciones de los pueblos y remplacen 
                  a los regímenes militares, monárquicos y reaccionarios 
                  que gobiernan en el mundo árabe, a través de un 
                  trabajo que una a los progresistas y teniendo por objeto el 
                  cambio del equilibrio de fuerzas actualmente existente. La cultura 
                  política y la práctica política, así 
                  como también el compromiso, son esenciales para la construcción 
                  de otra relación de fuerzas. El modelo brasileño 
                  es una gran fuente de inspiración para nosotros, en la 
                  medida en que la sociedad brasileña ha logrado salir 
                  de la dictadura sin consecuencias sangrientas. La pluralidad 
                  y el dinamismo de la izquierda ofrecen perspectivas de renovación 
                  del pensamiento más amplias que en el pasado. Para llegar a una democratización, la construcción 
                  de alianzas de las sociedades civiles a escala internacional 
                  puede constituir un medio de presión importante, a través 
                  de la movilización de la opinión pública 
                  mediante manifestaciones populares masivas, pero también 
                  a través de la negociación política por 
                  el camino de las urnas, por el boycott (compañías 
                  petroleras, redes que apoyan la ocupación).... Es el 
                  medio más seguro para incitar a los gobiernos occidentales 
                  a exigir el respeto de los Derechos Humanos y de las libertades 
                  individuales antes de firmar cualquier acuerdo de cooperación 
                  económica con nuestros países.  La anulación de la deuda de los países del 
                  tercer mundo es indispensable para el desarrollo económico, 
                  siempre y cuando se vea acompañada por medios de monitoreo 
                  internacional para evitar la corrupción y el malgasto 
                  de dinero.... La reforma de las instituciones internacionales económicas 
                  y políticas y la democratización de dichas instituciones 
                  (FMI, Banco Mundial y OMC). La necesidad de introducir reformas del sistema de las Naciones 
                  Unidas, cuyo papel se limita en la actualidad a convalidar de 
                  manera poco imparcial las políticas impuestas por los 
                  Estados Unidos y sus aliados en conformidad con sus intereses. 
                  Los ejemplos del incumplimiento israelí de las resoluciones 
                  son flagrantes si se compara la situación con la de Irak. 
                  La reforma estaría relacionada con la abolición 
                  del derecho de veto, que sólo está en poder de 
                  las cinco potencias responsables de la comercialización 
                  del 90% del armamento del planeta. También estaría 
                  vinculada con la consideración de la posición 
                  de las sociedades civiles y sus propuestas, que se ven poco 
                  o nada representadas por sus gobiernos. La sociedad civil debe constituirse en un laboratorio para 
                  reinventar lo político y reanimar los partidos políticos 
                  que agonizan a causa de su rigidez y su incapacidad para renovarse. 
                  La sociedad civil de los países democráticos dispone 
                  de medios de presión sobre quienes la gobiernan. Tiene 
                  entonces una responsabilidad para con las causas justas y legítimas 
                  de los pueblos amordazados por sus propios dirigentes o por 
                  el colonizador. La causa palestina, para citar un ejemplo, nunca 
                  estuvo tan presente en los medios ni recibió tanto apoyo 
                  favorable de la opinión pública como desde el 
                  momento en que los militantes occidentales e internacionales 
                  se comprometieron con ella. Ellos tienen la posibilidad de sensibilizar 
                  a su opinión pública y, en consecuencia, de tener 
                  un peso sobre las estrategias políticas internas y externas 
                  a través de las urnas. Para volver a la cuestión palestina, las 
              propuestas son concretas y ampliamente difundidas : 
              
                 La organización de una campaña internacional 
                  por la aplicación de las resoluciones de la ONU (la resolución 
                  194 votada en 1949 referente al derecho de retorno de los refugiados, 
                  las resoluciones 242 y 338 votadas en 1967 referentes al retiro 
                  israelí de los territorios ocupados, la resolución 
                  1392 votada en 2002 referente a la creación de un estado 
                  palestino). El retiro del ejército israelí de todos los 
                  territorios palestinos ocupados desde 1967 El desmantelamiento de todas las colonias israelíes 
                  en los territorios ocupados Un estado palestino independiente y soberano que controle 
                  sus fronteras, su aire y su agua, con Jerusalén Este 
                  como ciudad capital. El derecho de retorno de los refugiados palestinos. El reconocimiento de las responsabilidades, para hacer que 
                  la reconciliación sea posible. Sin un estado palestino independiente y viable, los pueblos 
                  de la región nunca vivirán seguros y en paz.
 Finalemente, en lo que respecta al caso iraquí, 
              urge enfrentarse a la guerra y a la agresión americano-británica, 
              apoyando al mismo tiempo al pueblo iraquí para que pueda 
              deshacerse de su dictador. El momento para movilizarse es ahora 
              o nunca.También habrá que afrontar las consecuencias de esta 
              guerra -si es que tiene lugar- sobre Palestina y el pueblo palestino, 
              sobre todo si la sociedad elige mañana por segunda vez consecutiva 
              a un criminal de guerra a la cabeza del estado (Sharon), que utilizará 
              con certeza el pretexto de la guerra en Irak para ir hasta las últimas 
              consecuencias de su lógica destructiva de Palestina y de 
              su pueblo.
 Estamos condenados a la esperanza y, sobre todo, 
              estamos condenados a construir esa esperanza y a hacerla vivir. |