La Asamblea mundial no es un evento
aislado. Es la culminación simbólica de una primera etapa
de la Alianza que comenzó en 1994, culminación de un ciclo
de trabajo que habrá contribuido a establecer las bases metodológicas
y prácticas de una dinámica ciudadana internacional.
Es por ello que la Asamblea tiene cuatro objetivos :
1 - Provocar, por su sola
existencia, una aceleración y un proceso de convergencia de todas
las dinámicas geoculturales, temáticas y de los colegios
de la Alianza. A causa de la Asamblea, la agenda
2000-2001 armonizó las agendas y los métodos de
los talleres, colegios y grupos locales. Gracias a esto, los participantes
de Lille tendrán cuadernos de propuestas provenientes de todo el
mundo, de diversos medios y abordando numerosos temas.
2 - Simbolizar, a través
de la diversidad geográfica, social y profesional de los participantes,
la sociedad civil mundial que está en vías de construcción.
La Asamblea crea un espacio de diálogo en donde distintos medios
y universos, que habitualmente se ignoran, comienzan a descubrirse mutuamente
y a confrontar sus visiones y propuestas. En el polo opuesto de lo que
sería un encuentro mediatizado, que buscaría generar enfrentamientos
y desacuerdo, la Asamblea Mundial organiza un proceso en donde puedan
darse a conocer los elementos de convergencia. Al hacer esto la Asamblea
es, en sí misma, una contribución a la invención
de nuevas formas de gobernanza mundial.
3 - Debatir un proyecto Carta
de las responsabilidades humanasde Carta
de las responsabilidades humanasde. Cada grupo socioprofesional
elaboró una reflexión sobre las responsabilidades y los
principios éticos que les corresponderían asumir frente
a los desafíos del siglo XXI. En continuidad con los trabajos llevados
a cabo desde hace varios años, la Asamblea elaborerá una
Carta en común, borrador de un tercer pilar necesario junto a la
Declaración Universal de los Derechos Humanos y la Carta de las
Naciones Unidas.
4 - Identificar los ejes
principales de una estrategia de cambio para el siglo XXI. Se someterá
a juicio de los participantes una gran cantidad de propuestas.
Ellos, por su parte, aportarán su propia visión. No se espera
de la Asamblea la aprobación de un texto de estrategias en común,
sino la identificación de los grandes ejes de dichas estrategias,
de los posibles puntos de convergencia y de las grandes cuestiones sobre
las cuales deben proseguirse el debate y la reflexión.
|